Pediátrica
La osteopatía pediátrica atiende problemáticas de cólicos, constipación, reflujo gástrico, problemas de amamantamiento, tortícolis congénita, plagiocefalia, deformaciones del cráneo, dolores de crecimiento.
Muchas personas presentan síntomas relacionados con el cuello, los hombros y los omóplatos. Estas condiciones tan frecuentes pueden ser el resultado de pasar mucho tiempo trabajando frente a la computadora, utilizando tabletas, teléfonos celulares o conduciendo largas distancias. En algunos casos, el cuello no puede moverse libremente, lo que empeora la tensión muscular, limita la amplitud de movimiento y causa dolor.
El tratamiento osteopático puede ayudar en gran medida a reducir o a eliminar estas molestias. Para ello, puedo utilizar una gran variedad de técnicas suaves para aumentar la movilidad de las articulaciones, reducir la tensión muscular de la espalda alta y del cuello, recuperar la amplitud de movimiento y mejorar el flujo sanguíneo al área. Posiblemente le sugiera adaptaciones de postura, estiramientos y ejercicios para evitar que los síntomas regresen.
Muchas mujeres embarazadas sufren de dolores pélvicos o de espalda baja en algún momento de su embarazo. Durante este periodo el cuerpo presenta muchos cambios que son estructurales, biomecánicos y hormonales. Estos pueden causar dolores de la espalda baja ya que las articulaciones cargan el peso de forma diferente y el tejido conjuntivo se adapta para cargar un mayor peso. La consulta en osteopatía puede ayudar mucho durante este periodo, ya que puede aliviar los dolores en gran medida y puede ofrecer información importante acerca de ejercicio, y recomendaciones posturales para reducir o eliminar el dolor.
Después del parto, el cuerpo de la madre necesita tiempo de recuperación y puede requerir ayuda adicional para mejorar el estado de salud del piso pélvico y facilitar el amamantamiento.
Las migrañas y los dolores de cabeza crónicos son muy frecuentes en la población y son la causa de múltiples visitas al médico, así como de ausencias de la escuela o el trabajo. Sus causas son múltiples e incluyen la dieta, el sueño, cambios hormonales, deficiencias nutritivas, dolores de cuello y/o de mandíbula, así como de malos hábitos de la postura.
En estos casos, el cuidado osteopático posiblemente requiera trabajar el tórax, los hombros, el cuello y la mandíbula. Tratar estas zonas brindará movilidad aumentada y reducirá la tensión, las posibles compresiones nerviosas y la inflamación.
Puedo recomendar ciertas adaptaciones de postura, estiramientos y ejercicios para evitar recaídas o recurrencias.
Una conmoción ocurre cuando se da una sacudida de la cabeza o puede ser el resultado de un golpe al cuerpo donde la cabeza y el cerebro se mueven al frente y luego hacia atrás muy rápidamente. Puede causar dolores de cabeza, mareos, problemas de la memoria, náuseas, desorientación, problemas de coordinación, cambios del estado de ánimo y/o cansancio.